ANII | Agencia Nacional de Investigación e Innovación

El presente proyecto pretende desarrollar una matriz genética sólida en la industria nacional y regional del cannabis. Al igual que otros rubros de índole productivo y/o agrícola, la semilla es lo primero. Es fundamental disponer de un abanico de opciones genéticas al momento de iniciar un proyecto en la industria del cannabis, ya sea para definir estas mismas en función de los enfoques finales que persigan los distintos proyectos en la cadena agro industrial, como también para adaptar estos mismos a las múltiples condiciones agro ambientales y sistemas productivos que apliquen a cada caso particular. No es lo mismo plantar y producir en el norte o en el sur, en suelos pesados o salinos, no es lo mismo plantar en Argentina que en Uruguay. Por esta razón surge este proyecto, el cual persigue como objetivo desarrollar, adoptar y generar más y mejores genéticas de cannabis para la industria nacional y regional, con fuerte énfasis en posicionar a Uruguay como un país referente en materia de genética hacia el mundo. El equipo profesional detrás de este proyecto cuenta con vasta experiencia en la industria semillerista. Lo que se busca es aportar los estándares y tecnologías más exigentes en términos de calidad a la genética de cannabis; un rubro nuevo, un oportunidad con grandes desafíos productivos y con enormes exigencias a nivel del producto final, sea agrícola, medicinal, recreativo, alimenticio, entre otras opciones. Confiamos en la industria del cannabis, como un sector que podría liderar el desarrollo de productos uruguayos a la altura de los mercados más exigentes del mundo. Para alcanzar esta ambiciosa meta es fundamental partir de una buena base; semilla de calidad e identidad comprobada.

El proyecto llevado a cabo por Simpla, durante el año 2022, 2023 y parte del 2024, fue sin duda un pilar fundamental para la generación de información para la industria del cáñamo y cannabis, dado que permitió conocer los aspectos primarios de la fase agrícola/productiva. Así se establecieron bases sólidas para este rubro emergente, con gran potencial de desarrollo en el corto, mediano y largo plazo. Durante el transcurso de este proyecto, y teniendo en cuenta el trabajo previo de la empresa, se probaron a campo un total de 44 genéticas, provenientes de distintas partes del mundo. Todos estos materiales genéticos han mostrado numerosos aspectos de interés para las finalidades que el cáñamo ofrece. Tal es el caso de la alimentación humana y animal, la construcción, el mercado regulado del carbono, la salud humana y otras posibilidades de usos. Lógicamente en este proceso se fueron seleccionando los materiales genéticos con mejores condiciones adaptativas a las condiciones de Uruguay, pero también se seleccionaron otras genéticas para a las condiciones de la región, dado que LATAM cuenta con múltiples ambientes para esta especie. El apoyo de ANII permitió acelerar el conocimiento, la capacitación y la conexión con distintos interlocutores y referentes de este sector a nivel global. Sin duda fue un aspecto clave a la hora de implementar distintos tipos de acuerdos a nivel regional y nacional, los cuales permitieron - además de trabajos puntuales - profundizar el manejo agronómico en esta especie. Esta especie cuenta con miles de años de historia, pero con muy poca información formal. El haber generado e implementado ensayos varietales, producciones extensivas y demás aspectos de índole agronómico, permitió generar información nacional de alto valor, sumamente importante para la construcción de otras industrias anexas a lo que esta especie tiene para ofrecer.